LA BIODIVERSIDAD, FUENTE DE VIDA

"La teoría orgánica puede resumirse como la observancia de las seis leyes siguientes: primera, el horticultor debe trabajar con la naturaleza y no en contra de ella; segunda, la naturaleza es diversa y por tanto el horticultor debe practicar la diversidad; tercera, debe criar otras formas de vida - animal o vegetal- en medios los más parecidos posibles al que les sea natural; cuarta, debe devolver al suelo tanto, o casi tanto, como le ha quitado; quinta, debe alimentar al suelo y no a las plantas; y sexta, debe estudiar la naturaleza como un todo y no como una parte aislada".


John Seymour

viernes, 28 de diciembre de 2012

EL HUERTO A PRINCIPIOS DEL INVIERNO

En los primeros días del invierno ya se percibe que las tardes son algo más largas. La meteorología, en general, está favoreciendo a los cultivos. Desde el mes de septiembre las lluvias han sido generosas, con más de 350 litros contabilizados en el pluviómetro del huerto. La continuidad de las lluvias incluso ha llegado a dificultar el trabajo de la tierra. No obstante, ha sido bien caída y con buen drenaje en el terreno. Las temperaturas suaves y con ausencias de heladas, sobre todo en la última parte del otoño y este principio de invierno hacen que las plantas (cultivos y arvenses) aprovechen para crecer unos centímetros.
Se está en una época más de observar que de trabajar el huerto. Aunque, aún se siguen trasplantando lechugas y cebollas.
Las habas sembradas a mediados de noviembre ya tienen más de un palmo de altura. Los ajos comienzan a nacer tras haber sido sembrados a principios de diciembre (como dice el refrán “los ajos por navidad ni nacidos ni por sembrar”).
Coliflor protegida por las hojas que acompañan a la pella
La cosecha de coliflores este año se ha adelantado con respecto a años anteriores, debido a las buenas condiciones meteorológicas. De la misma forma algunas coles comienzan a estar en su punto.
La primera siembra de rabanitos realizada a principios de agosto ya se cosechó por completo, de muy buena calidad. La segunda siembra de principios de noviembre comienza ahora a cosecharse siendo de peor calidad, sobre todo debido a las temperaturas más frías de mediados del otoño. También otra crucífera, los nabos se han empezado a coger.
Rabanitos a punto para ser cosechados
Por otra parte se sigue preparando la tierra que albergará uno de los cultivos claves del huerto, las patatas, a partir de marzo, aportando materia orgánica, procedente de nuestro compost.
Y tenemos un nuevo compañero en el huerto…

José Manuel

domingo, 9 de diciembre de 2012

LA BIODIVERSIDAD: LA AGRICULTURA, LAS PLANTAS ARVENSES Y LAS MALAS HIERBAS

Se ha hablado en varias ocasiones en el blog de la importancia de la biodiversidad. La biodiversidad podría definirse como el conjunto de plantas, animales y microorganismos que viven e interaccionan en un ecosistema.
Generalmente, a mayor número de especies diferentes mayor biodiversidad. Se entiende que la biodiversidad es mayor cuando esta variabilidad está repartida en un número de especies de forma homogénea.
Por tanto, todas las especies (vegetales, animales, hongos, etc.) forman biodiversidad. Incluso las plantas arvenses son parte de ella. Y es que una planta que, en principio, no queremos en nuestro cultivo no siempre será una mala hierba. Será mala hierba cuando interfiera, de una u otra manera en el cultivo, mientras que será una planta arvense cuando su presencia no afecte, dentro de un margen de tolerancia, al cultivo.
Hierbas arvenses en primer plano, frutales y cultivos en asociación (cebollas, lechugas, coles y coliflores) aportan biodiversidad al huerto
A menudo, el agricultor gusta de tener su campo “limpio”, pero no repara que gran cantidad de veces esto es síntoma de un gran desequilibrio y al más mínimo cambio de condiciones el cultivo se vuelve vulnerable a alguna plaga, enfermedad o invasión de malas hierbas.
Una simple flor de cebolla silvestre atrae a polinizadores al huerto,
muy importante para que los frutos cuajen, entre otras cosas.
El beneficio que aporta la biodiversidad suele ser no patente para la mayoría de los agricultores. Para aquellos observadores, repararán en que hay gran número de depredadores parásitos, polinizadores, etc., que ayudan a que el ecosistema se mantenga en equilibrio y el cultivo tenga una mayor producción.
Sin dejar de lado lo dicho, existen ciertos casos en los que la sola presencia de ciertas especies puede ser perjudicial. El caso concreto de la correhuela (Convolvulus arvensis) que se convierte, especialmente en el verano en huésped del oídio infestando a cultivos de solanáceas y cucurbitáceas especialmente.
Los setos constituyen un elemento enriquecedor de la biodiversidad. Estos son muy importantes por ser refugio de fauna auxiliar y en algunos casos elementos de protección contra la erosión y el viento. Contribuyen a la polinización y al reciclado de nutrientes y al control de plagas.
Jara blanca en floración en el borde del huerto con una abeja
Una acción negativa, que en ocasiones hacen los agricultores y hortelanos es quemar y tratar con herbicidas los bordes de las parcelas. De esta manera contribuimos a que no exista biodiversidad, floración que atraiga polinizadores, refugios, etc. Incluso en parcelas grandes es positivo intercalar franjas no cultivadas con especies esontáneas, ya que de otra manera el efecto positivo de ella no se dejará sentir (por el mismo tamaño de la parcela).
Una de las mayores preocupaciones de un agricultor con respecto a la biodiversidad es el descenso de la producción del cultivo. En esto sentido, existe un balance global positivo y que el balance de outputs-inputs (producción- insumos) es más favorable a los primeros. Es decir, el rendimiento del cultivo es mayor respecto al aporte de fertilizantes, plaguicidas, herbicidas, etc.
Después de todo lo escrito, puede ser que alguno se pregunte como fomentar la biodiversidad en su huerto, campo o parcela. Moderar la intensidad de manejo, ajustar el abonado según necesidades del cultivo, eliminar en lo posible los tratamiento herbicidas, emplear productos químicos específicos (no de alto espectro), hacer rotaciones de cultivo, respetar los márgenes de las parcelas,… Es decir, dejar a la naturaleza hacer pero isn dejar de observar y actuar cuando sea necesario y no olvidar que se trata de por sí de un sistema intervenido por la mano del hombre.
No obstante no se puede esperar que el primer año en que se cambie de manejo los beneficios de la biodiversidad sean patentes. Se deberá ser constante en estas prácticas favorables a la biodiversidad que en dos o tres años se empezará a notar un mayor equilibrio del agrosistema que repercutirá en obtener más con menos.

(Adaptación del cuadernillo del Mº de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino “La biodiversidad y la agricultura: 11 preguntas sobre la biodiversidad y las plantas arvenses”, año 2010).

José Manuel

miércoles, 21 de noviembre de 2012

ES TIEMPO DE SEMBRAR LECHUGAS DE INVIERNO

La lechuga es un cultivo típicamente invernal. En extensivo y de forma tradicional se suelen echar los semilleros o “criaeros” a finales del verano o principios del otoño.
"Criaero" de lechugas
Una de las estrategias a seguir para tener lechugas de forma escalonada es realizar siembras y posteriores trasplantes igualmente escalonados.
Tras realizar el semillero las lechugas se desarrollarán, según las temperaturas, en más o menos pocas semanas.  El semillero de forma tradicional se hace en un pequeño trozo de tierra un poco estercolada que mantenga bien la humedad y no esté expuesta a los calores del mediodía de finales del verano. Cuando estas lechugas tengan una altura de 3 a 8 cm aproximadamente, y con una raíz en buen estado, será un buen momento para trasplantarlas al lugar donde se desarrollarán.
No es un cultivo exigente, aunque, como a todos, les gusta que la tierra esté mullida. A diferencia de otras plantas no lleva mal los encharcamientos, pero los prolongados pueden llegar a asfixiar sus raíces por falta de oxígeno.
Existen diferentes variedades, siendo seguramente las más conocidas la lechuga romana o de oreja de mula y la lechuga iceberg.



Para realizar el trasplante será mejor escoger un día con cierta humedad, y en cualquier caso evitar días calurosos y las horas centrales del día. En primer lugar sacaremos la planta del semillero, moviendo un poco la tierra alrededor de las lechugas, de manera que dañemos lo menos posible las raíces. Podremos quedar un poco de tierra entre sus raíces, y no vendrá mal mantenerlas humedecidas en tanto que vamos trasplantándolas para que no se deshidraten.

Lechugas en una cuba con algo de agua (izda.)


Se pueden trasplantar en filas o en caballones. Preferentemente con un sembrador abriremos un hoyo siempre mayor que el sistema radicular de la lechuga, introduciremos en la parte más profunda tierra suelta y tras esto meteremos la lechuga intentando que la tierra quede apretada alrededor de sus raíces.
La planta quedará enterrada de manera que el cuello de la raíz esté bajo tierra. Siempre es preferible que quede enterrada un poco más de la cuenta antes de muy superficial. Por último, y siempre que la tierra no tenga humedad, regaremos un poco en torno a la planta, con precaución de que no se lleve la tierra el riego.


José Manuel

jueves, 15 de noviembre de 2012

EL EUCALIPTO COMO APROVECHAMIENTO, UNA CUESTIÓN MAL ENTENDIDA.

El primer artículo con el que nacía este blog trataba sobre el eucalipto en España (http://elingeniero-y-elabuelo.blogspot.com.es/2011/02/la-polemica-historia-de-los-eucaliptos.html). En esta entrada comentaba la mala prensa y la ligereza con la que se habla de los eucaliptos.
Existen gran cantidad de comentarios erróneos acerca del eucalipto que se han ido difundiendo sin fundamento alguno.
No hay muchos que expongan sus criterios a la hora de atacar a este espectacular árbol, no un elemento contaminante ni esquilmador de tierras como se ha querido ver.
Breve historia del eucalipto en España
Su introducción en España data del año 1860, cuando el farmaceútico catalán Pedro Antonio Ventalló i Vintró trajo, procedentes de Australia, eucaliptos a la Granja de Agricultura de Barcelona. Poco después Fray Rosendo Salvado, un monje benedictino, lo plantó por primera vez en Galicia, en la provincia de Pontevedra. Desde aquí se llevó a la cornisa cantábrica entre 1865 y 1867.
En 1868 se plantaron eucaliptos en el Real Jardín Botánico de Madrid, que posteriormente serían cortados por la prolongación de la Gran Vía madrileña.
En la primera mitad del siglo XX, se empezaron a extender las plantaciones por el suroeste peninsular, siempre muy vinculadas a la actividad minera y del ferrocarril.
Desde entonces, los núcleos más importantes de plantaciones de eucalipto han estado en la provincia de Huelva, en Galicia y la cornisa cantábrica, especialmente en Asturias. Actualmente su aprovechamiento en explotaciones forestales se resume a la corta de madera para celulosa, biomasa y otros usos madereros (vigas, traviesas, chapas, etc.).
Como referencia, en la provincia de Huelva se han llegado a plantar unas 130 especies diferentes de eucalipto, algunas con un posterior uso y otras empleadas en arboretos y experimentaciones.
En España tenemos eucaliptales protegidos. Uno de ellos es el eucaliptal de Chavín, en Pontevedra, declarado Monumento Natural. Son unos 600 individuos, que fueron plantados entre 1880 y 1912, y entre los que se encuentra un eucalipto blanco de más de 80 metros de altura y de diámetro mayor de 2,50 m. Es llamado “el Abuelo”.
Actualmente, en nuestro país existen gran cantidad de especies, unas con preferencia por aprovechamiento maderero y de celulosa (para papel) y biomasa, como Eucalyptus globulus (eucalipto blanco), otras como ornamental como Eucalyptus cinerea o  Eucalyptus calophylla, y otras que destacan por su aroma como Eucalyptus citriodora (no olvidemos que se toman vapores de hojas y flores de eucalipto para aliviar los catarros).
En España los eucaliptales cubren unas 450.000 hectáreas (3,5% de la superficie forestal de España), que producen 2,8 millones de metros cúbicos de madera al año (más de un 25% de la producción nacional de madera). Aún así, España consume 4,3 millones de metros cúbicos de madera de eucalipto, por lo que existe un déficit de 1,5 millones de metros cúbicos de madera de eucalipto que se importa de terceros países.
Mala información
Existe una gran cantidad de comentarios acerca del eucalipto que se han ido extendiendo y que se afirman como ciertos, y sin embargo no se aportan evidencias científicas ni comprobadas.
En primer lugar, nos situaremos. El eucaliptal no es un bosque autóctono, ni siquiera es un bosque, sino una plantación forestal y no hay que olvidar que la actividad forestal, aunque no lo parezca genera impactos, al igual que lo hace la agricultura o la ganadería. El aprovechamiento es más parecido al de un cultivo que al de un bosque. No obstante, en una plantación forestal el consumo de fertilizantes, nutrientes y agroquímicos (insecticidas, fungicidas o herbicidas) no tiene nada que ver con un cultivo agrícola. Son ciclos intensivos, por la misma ventaja que tiene el eucalipto de crecimiento rápido que hace que se prefiera a otras especies forestales.
El eucalipto, no se trata en sí misma de una especie negativa. Puede ser negativo o inadecuado el manejo que se hace del mismo. Como ejemplo pongamos la soja en Sudamérica o la palma (para el aceite de palma) en Asia. Ambas especies han acabado con muchos bosques autóctonos, pero no son estas especies las causantes sino el manejo que se hace de ellas.
En muchas ocasiones, la no presencia de un eucaliptal no supondría la existencia de un bosque autóctono, sino de un pastizal o de un jaral, que llega a tener un valor ecológico menor.
A todo esto hay que sumar la repercursión socioeconómica, traducida en generación de empleos, pues en las zonas donde existen aprovechamientos de eucalipto se crean puestos de trabajo en gran número. Cosa que si no existiera este aprovechamiento no sucedería (un pastizal o una dehesa, desgraciadamente no generan esta cantidad de empleos; todo pasa por que existan unas tasas que repercutan y fomenten estos sistemas más autosuficientes).
Por otra parte, existen voces que aluden a la desviación de las riquezas generadas hacia fuera de la comunidad rural donde se produce y la transferencia de tierras públicas o comunales a empresas privadas, empobreciendo las zonas rurales. Habría que analizar cada caso concreto.
Ecológicamente, una de las críticas que se realizan del eucalipto es la alelopatía (la popular frase de que no crece nada bajo los eucaliptos). La alelopatía es la emisión de sustancias que evitan el desarrollo de otras plantas bajo sus copas. Esto tiene algo de cierto, pero no es tanto por la alelopatía que no crezca nada bajo el fronde de estos árboles, sino más por las altas densidades empleadas. La prueba está en que cuando las masas de eucaliptos se abren empiezan a crecer bajo ellos especies autóctonas de la zona.
Otra crítica es el elevado consumo de agua por parte de los eucaliptos. Si recurrimos a ensayos técnicos (que son los que dan validez a las afirmaciones), el eucalipto consume una cantidad normal, y mucho menos que otros árboles autóctonos como chopos, e increíblemente mucho menor que los cultivos agrícolas. El eucalipto consume agua a mayor ritmo debido a su espectacular crecimiento, pero necesita menor cantidad de agua que muchos otros árboles por materia seca producida.
También, mirando los aspectos positivos, las plantaciones de eucalipto, al igual que otras forestales, retienen carbono, frenando en cierto modo el ciclo y la generación de CO2 a la atmósfera.
Los eucaliptales, como “bosques” productores, también tienen un papel de “bosque” protector, pues evitan la tala de bosques autóctonos dentro y fuera de nuestras fronteras. También contribuyen a frenar la erosión
Existen actividades ligadas a los eucaliptales y que normalmente no se contemplan como la producción de los llamados productos no madereros: miel, esencias, etc. Además de que pueden llegar a ser de interés turístico (sobre todo con el creciente turismo rural).
Mejorar la gestión de los eucaliptales
El primer paso para mejora la gestión es la adecuada elección de la especie, el lugar, el motivo y el modo en que se llevará la plantación. Otro aspecto muy importante es la aceptación y el interés de la sociedad por la plantación, de manera que se eviten consecuencias negativas.
Tras esto hay muchas cosas que mejorar, como la ordenación forestal con inclusión de diferentes rodales de edad, corredores ecológicos, respetar los cauces de agua,…
El tema de los corredores ecológicos es especialmente importante en plantaciones de una superficie considerable, de manera que se garantice el paso de la fauna y la menor interferencia en su ciclo biológico.
La diversificación es un aspecto que aunque difícil de aplicar a plantaciones tan intensivas sería recomendable practicarlo, de manera que se alternen turnos cortos con otros no tan cortos y de menor densidad (todo pasa por diferentes destinos de los productos).
También en la ordenación forestal será responsabilidad del ingeniero planificar la integración de la regeneración del bosque autóctono cuando termine la vida de la explotación forestal del eucaliptal.
Si existe un déficit de producción de madera es porque se consume por encima, por lo que sería lógico aumentar la producción o reducir el consumo. Para ello habrá que tener una conciencia social más abierta, adaptada e informada. Y si nos miramos a nosotros mismos habría que hacer autocrítica y pensar la cantidad de papel que malgastamos, o la madera que no se reutiliza. Mucha de la gente que crítica a estas plantaciones no tienen en cuenta el consumo que ellos mismos hacen los productos derivados.
No nos llevemos las manos a la cabeza al hablar del eucalipto, profundicemos en el sistema de producción e informémonos mejor antes de opinar.

Por último, decir que la FAO tiene informes acerca del eucalipto muy interesantes, como este http://www.fao.org/docrep/005/y7605s/y7605s03.htm#TopOfPage


José Manuel

miércoles, 7 de noviembre de 2012

LA SOMBRA DEL NOGAL

Incluyo aquí un poema de Gerardo Diego, uno de los poetas de la Generación del 27, que hace referencia a un árbol muy característicos de los huertos: el nogal. Este poema es la "Sombra del nogal".

Es cierto que su sombra, no tanto por sí misma sino por sus hojas no es beneficiosa para acoger otras plantas bajo él. Esto se debe a que sus hojas contienen sustancias alelopáticas, en forma de taninos, que son tóxicas. Pero también aporta una sombra fresca durante los meses calurosos que sirven de descanso al hortelano y su fruto es uno de los frutos secos que más gustan.

No obstante, es el nogal uno de los árboles más codiciados de los huertos, no solo por sus frutos sino también por su madera, que es considerada de las de mayor calidad, recibiendo el apelativo, junto con las maderas de árboles como el castaño, el tilo o el cerezo, de maderas nobles. Aquí dejo el poema:


La sombra del nogal es peligrosa
Tupida en el octubre como bóveda
como cúpula inmóvil
nos cobija e invita
a su caricia fresca
y van cayendo frutos uno a uno
torturados cerebros, nueces nueces
Por la noches
sombra de luna muerta da el nogal y van suicidándose una a una
sus hojas quejumbrosas
y pies desconocidos invisibles
las huellan las quebrantan las sepultan
librándolas así
del torbellino eólico
que azota a lo mortal abandonado
sobre la faz fuenesta de la tierra
impenetrable
Pero, ¿quién pasa, quién posa?
¿De quién los pies piadosos redentores?

Gerardo Diego, 1977

domingo, 28 de octubre de 2012

DOCUMENTAL SOBRE PROYECTO DE HUERTOS

Recomiendo este documental emitido en Canal Extremadura sobre los huertos del entorno del río Matachel a la altura de Hornachos, herencia de los moriscos y su arte. Personalmente me ha parecido muy didáctico y el proyecto que se propone fenomenal. Solamente invitaros a verlo y escucharlo con atención.

http://www.canalextremadura.es/alacarta/tv/videos/el-lince-30-la-herencia-de-hornachos-281012

La herencia de Hornachos

José Manuel

martes, 9 de octubre de 2012

LAS ROTACIONES: ENTENDER LA SUCESIÓN DE PLANTAS EN EL HUERTO

Con el inicio del otoño nos planteamos introducir nuevos cultivos que ocuparán el lugar dejado por los de verano, ¿pero cuál será el lugar más apropiado?
Planificar los cultivos a corto plazo es muy importante, pero también lo es hacerlo a medio plazo, pues de ello dependerá en gran parte que nuestras hortalizas estén sanas y se desarrollen según su potencial. Esto es lo que llamamos las rotaciones de cultivos.
Las rotaciones permiten mantener la fertilidad de la tierra y un equilibrio que favorece una mayor diversidad biológica y resistencia de las plantas.
Es evidente que si año tras año cultivamos en el mismo lugar un cultivo facilitaremos el asentamiento de plagas permanentemente y que las enfermedades (hongos, bacterias y virus) permanezcan alojadas en el suelo y los restos del cultivo. Además el suelo, con la sucesión de los mismos cultivos o cultivos de la misma familia botánica (con exigencias similares) terminará presentando síntomas de agotamiento por extracción continuada de los mismos nutrientes, lo que se conoce como fatiga del suelo.
Después de sandías y melones se puede introducir espinacas que es menos exigente, aprovecha el aporte de abonado realizado y además presenta un ciclo de cultivo idóneo para compatibilizarlo con los cultivos de verano
Nos estaremos acercando a un monocultivo, con las consecuencias negativas que ello tiene, entre ellas la necesidad de grandes aportes de insumos (abonos, fitosanitarios,…).
Si se quiere hacer una buena rotación habrá que contemplar no solo no repetir cultivos de la misma familia en el mismo terreno, sino también no repetir cultivos que tengan el mismo órgano de aprovechamiento (por ejemplo tras zanahorias no cultivar en el mismo lugar rábanos). También un conocimiento de las exigencias en nutrientes de cada cultivo ayuda a establecer la rotación. Por ejemplo, una planta gran consumidora de nitrógeno, como puede ser la patata, deberá ir sucedida de otra mucho menos exigente o que incluso la acumule como puede ser una leguminosa (cuidado habrá que tener con el haba, pues comparte con la patata la enfermedad Rhizoctonia). Otros aspectos a tener en cuenta son el sistema radicular como es de profundo, si deja compactación, si es una planta esquilmante o mejorante del suelo, etc.
Como norma general se fija como periodo de rotación de 3 a 4 años, aunque esto siempre dependerá del cultivo.
Es adecuado tener el terreno dividido en pequeñas parcelas de manera que las rotaciones no sean más fáciles.
También hay que considerar, que en agricultura moderna, y con los estudios realizados es conveniente mantener el suelo cubierto, es decir, organizar las rotaciones de manera que la parcela esté cultivada en la mayor parte del tiempo posible.

José Manuel

jueves, 27 de septiembre de 2012

POBLAR LOS SETOS DEL HUERTO DE FLORES

Con la llegada de las primeras lluvias el terreno empieza a humedecerse y aún con la tierra cálida y ahora esponjosa se dan las condiciones ideales para acoger a semillas y germinarlas, y también realizar esquejes. Es una época propicia para volver a visitar el campo, y con un poco de conocimiento de la flora de la zona podremos coger esquejes o semillas de plantas que tengan una buena floración para nuestros setos. En cualquier caso siempre la recolección habrá que hacerla con conocimiento de causa, pues estamos extrayendo material vegetal de su ambiente, e intentando que no sea una recolección en masa y si puede ser ayudando a la propia regeneración de la planta/mata en cuestión.
Flor de jara blanca, típica de suelos calizos
Podemos recolectar plantas de abundante floración, como pueden ser jaras, jaguarzos, compuestas,… aromáticas como el romero, el cantueso, el orégano,… y también trepadoras y lianas como la zarzaparrilla, el escaramujo o la madreselva. Siempre nos ayudarán a mantener un huerto en equilibrio biológico y mejorará el aspecto del mismo.
Si tenemos en cuenta otros aspectos como que exista variabilidad en el seto y que haya floración escalonada tendremos un seto muy completo.

 
A la izda. Madreselva en fructificación tras haber tenido la floración en primavera-verano; a la dcha. romero en floración. Una de las plantas que mejor se adapta al seto y con floración abundante casi todo el año
Estas plantas atraerán a insectos auxiliares que ayudarán al control de las plagas. Insectos como mariquitas, sírfidos, avispas, e incluso animales como carábidos, murciélagos y un largo etcétera de auxiliares, que junto con las abejas actuarán como benéficos polinizadores, a la vez que nos aseguran una capacidad reguladora importante, librándonos de huevos, larvas e insectos adultos de especies que pueden convertirse en plagas.

José Manuel

viernes, 21 de septiembre de 2012

NOTAS DEL HUERTO AL FIN DEL VERANO

Con los últimos coletazos del verano las plantas se resisten a dejar de producir, y lo hacen en abundancia; más sabiendo que nos encontramos en la segunda quincena de septiembre y a las puertas del otoño. También hay que decir que el tiempo les está siendo propicio y mientras el agua por goteo no le falte, solo las decrecientes horas de luz son un factor que afecta negativamente y contra el que nada se puede hacer en extensivo.
Con esta situación, los cultivos de verano siguen produciendo y dan para abastecer a la casa (habiendo incluso excedentes). No obstante, el ritmo de producción como es lógico no es el de pleno verano.
No es solo momento de cosechar, también es tiempo de recoger semillas para la próxima campaña. Así, ya llevamos algunas semanas extrayendo semillas de los mejores tomates, de las diferentes variedades, sobre todo de "corazón de toro" y de "piel de doncella", que son las que mejor comportamiento han mostrado en cuanto a productividad y tamaño de frutos. También hemos recogido semillas de calabacín. Con respecto a las de calabacín, se trata de semillas extraídas de frutos de plantas procedentes de nuestras propias semillas de la campaña pasada. La idea es autoabastecernos con semillas producidas en nuestro propio huerto.

Calabacín en su punto de maduración óptimo para la recolección de semillas (izda) y extracción de semillas (dcha)
Como aspecto diferencial con respecto a las hortalizas veraniegas, hemos cosechado algunos repollos, que son bastante tempranos (en condiciones normales los primeros los tendríamos ya casi metido el invierno), pero su siembra en junio, la benevolencia del verano y los riegos con goteo han hecho efecto. Junto a los repollos transplantamos coles y coliflores. En ellos ya empieza a haber a ataque de la oruga de la col (Pieris spp.). Este año trataremos, y sin que sirva de precedente, con el insecticida biológico Bacillus thuringiensis. Nos hemos visto obligado a tratar dado el fuerte ataque y la dificultad que existe para controlar manualmente esta plaga.
Ataque de oruga de la col. Se observa alguna oruga en las hojas
Las lechugas, también sembradas con adelanto en junio las hemos llevado a tierra en estos últimos días. Son las primeras de las que iremos trasplantando de manera escalonada para tenerlas de la misma manera para consumir a lo largo del otoño y el invierno.

Ya estamos pensando en los cultivos del próximo año para establecer una buena rotación. Para ello ya hemos reservado un espacio para uno de los cultivos principales, las patatas, donde pasaremos la mula mecánica. Tras esta labor aplicaremos en superficie el estiércol procedente de nuestras gallinas. La razón de dejarlo en superficie es que vaya siendo asimilado y mezclando lentamente con la tierra ayudado por lombrices, cochinillas y microorganismos del suelo.
Y aprovechando el fresco del huerto nos encontramos a alguna que otra visitante.

José Manuel

martes, 28 de agosto de 2012

EL HUERTO EN VERANO

Tras dos meses sin movimiento en el blog, pero con mucho trabajo en el huerto, hay cosas que contar sobre su estado en estos meses de verano.
Las temperaturas están siendo benévolas, y las tormentas de verano no han hecho acto de presencia, al menos hasta ahora. Está siendo un verano bastante bueno en este sentido, pues las lluvias no suelen ser en esta época beneficiosas.
El calor es la nota dominante y los cultivos que gustan de él los que mandan. Riego, altas temperaturas y suelos ricos en materia orgánica son los factores comunes de estos cultivos.
La carencia de lluvia se suple con un aporte adecuado de agua (es tan malo la escasez de agua como el exceso, que produce encharcamientos y con ello pudriciones y asfixia radicular). La elección del goteo es un acierto, en cuanto ahorro de tiempo y agua.
Los calabacines son quizás los más productivos en cuanto a cantidad y prolongación en el tiempo (ya teníamos calabacines a principios de junio). Lo único que para esta potente hortícola es el oídio que afecta a sus hojas y reduce su producción. Como solución no aplicamos azufre, simplemente arrancamos las hojas que se ven afectadas por oídio, sin ser suficiente esta medida, pero alivia algo a la planta.
Los tomates están dando buena cosecha, y con respecto al año pasado no tenemos chinche verde, que depreciaba bastante el tomate. Los tomates son de buen tamaño y están sanos y carnosos, muy válidos para conservas y ensaladas. Me llamó la atención unos tomates de piel rosácea que creo que llaman “Piel de Doncella”, un tomate de tamaño grande y en el que destaca su color rosáceo. Pero claro el tomate también tiene, en este caso, una plaga que algo le afecta, es la mosca blanca que reduce la productividad de la planta al succionar la savia y producir pequeñas heridas que sirven de foco por donde entran otras enfermedades.
Pimientos y sobre todo pepinos no están siendo lo bueno que esperábamos, a pesar de tener una cosecha suficiente como para abastecer a la casa. Los pepinos salen amargos quizás sea por lo que dice El Abuelo,  por un estiércol no adecuado. Algo debe de haber, pues al arrancarlos parece que sufren de alguna enfermedad de suelo; mientras que los pimientos tienen una enfermedad que hace que se pudran por la parte del pico del pimiento.
Sandías y melones se han desarrollado bien tras haberle aportado justo antes de la siembra de las “pebas” estiércol de cerdo hecho, justo en su medida.
También es cosa del verano el trasplante de coles, coliflores y algunos brócolis y lombardas para que se desarrollen bien antes de llegar el invierno. Las coles se han desarrollado bastante bien y mantienen una lucha por ocupar un espacio que se ha quedado pequeño para dos potentes sistemas foliares.
También está hecho el semillero de lechugas y cebollas para trasplantarlo cuando llegue el momento, lechugas antes que cebollas.
Es una época de mucha producción de desechos orgánicos que se reciclarán en los montones de compost para futuros usos que se verán recompensados con una mejor y mayor producción, a la vez que un mayor equilibrio en el sistema.

José Manuel

viernes, 6 de julio de 2012

QUINTO DÍA DEL CURSO TALLER

Hoy ha sido el último día de nuestro curso-taller. Solo ha sido una semana que se ha hecho corta y nos ha sabido a poco, pues nos hemos divertido mucho. Como profesor he aprendido mucho de estos niños y espero que ellos también de mí.
La mañana empezó con el riego de nuestras plantas. Pudimos observar como ya vienen naciendo algunas de ellas, lo cual no está mal, ya que las sembramos el martes (excepto las lechugas que lo hicimos el lunes). Dejamos las plantas en su lugar sombreado del huerto y el miércoles de la semana que viene cada uno recogerá la suya para llevársela a casa (día que esperamos que hayan nacido sino todas, sí casi todas).
Después estuvimos explicando como se hacía el herbario para finalizarlo. Sacamos nuestras plantas, aún no secas por falta de tiempo, y las clasificamos. Les pusimos sus correspondientes etiquetas de identificación. Con esta tarea estuvimos un buen tiempo, pues tuvimos que recortar las fichas de cada planta, ponerle su nombre, pegarla, reconocer la planta e introducirla en su lugar.
Al terminar con el herbario, intentamos terminar los nidos, pero nos fue imposible. Las puntas eran demasiado grandes para las tablas que teníamos. En esto tengo que decir que fue un fallo mío. No obstante, intentaré terminarlos para poder enseñárselos a los alumnos el miércoles.
Ya terminando hicimos un repaso del huerto, comprobando que habíamos aprendido a diferenciar cada uno de los cultivos e incluso las malas hierbas.
Finalmente, cosechamos unas zanahorias, viendo que debajo de esa hojas verdes, enterrado en la tierra, se esconde un gran tubérculo, la zanahoria que comemos.
Por mi parte, agradecer la confianza depositada por los padres y los niños en mí. Ha sido un orgullo poder enseñar en estas pocas horas lo que ha dado tiempo con esfuerzo, y ver que los niños se han implicado mucho, incluso llegando antes de la hora por deseo de aprender y divertirse.
Un placer poder enseñar otro tipo de horticultura.
Y claro está, nos hicimos una foto de familia.


José Manuel

jueves, 5 de julio de 2012

CUARTO DÍA DEL CURSO-TALLER

Hoy ha sido un día muy fructífero, en el sentido literal (y también figurado) de la palabra , pues al final de la clase hemos recolectado unas ciruelas.
Prensa de las plantas para el herbario
La mañana empezó, como ayer, regando las plantas y cambiando las hojas de los periódicos de la prensa. Las plantas sembradas en los yogures aún no han nacido y posiblemente lo hagan la semana que viene.
A continuación dibujamos en las tablas de madera y con las plantillas las piezas para hacer el nido, que mañana terminaremos.






Lo siguiente que hicimos fue observar y aprender el nombre de diversas herramientas utilizadas en el huerto y que las usaríamos para repicar las coles. Distinguimos entre sacho (zacho) y azada; entre sembrador y plantadora y vimos los goteros. También vimos como se usaban.
Por último explicamos el procedimiento de trasplante de las coles. Tras esto cogimos todas las herramientas necesarias, llenamos las botellas de agua y salimos al huerto; repicamos las coles del semillero y nos fuimos al caballón donde las hemos trasplantado.
Allí todos colaboramos y nos repartimos el trabajo. Repasamos el caballón, hicimos los hoyos con el sembrador, echamos agua, introdujimos la col correspondiente, aportamos tierra y la apretamos para que quedaran las raíces fijadas a ella y regamos de nuevo suavemente.
Repasamos el caballón ya hecho
Unos regamos, otros trasplantamos, otros acolchamos con paja,...
Finalmente acolchamos con paja y pusimos los goteros. Muy buen trabajo por parte de los alumnos. 


Trasplantando y acolchando

Y como digo, al final cogimos unas ciruelas, repartiéndolas entre todos y llevándonolas a casa.




José Manuel

miércoles, 4 de julio de 2012

TERCER DÍA DEL CURSO-TALLER

La mañana empezó con el riego de nuestras plantas con la regadera. Después nos fuimos a la clase y cambiamos las hojas de los periódicos a las plantas de la prensa. Observamos como los periódicos estaban húmedos y las plantas habían perdido agua y estaban aplastadas por el efecto de la prensa. 
Romero prensado
A continuación salimos al huerto y vimos los nidos que había en algunos árboles frutales. Esto nos sirvió de introducción para ver que pájaros eran típicos del huerto, con imágenes y sonidos de sus cantos. Distinguimos entre pájaros oportunistas, granívoros e insectívoros. Vimos que nosotros favoreceríamos sobre todo a los insectívoros que se comen algunos de los insectos que constituyen plaga en el huerto.
Para favorecerlos comenzamos la construcción de dos nidos, haciendo plantillas que nos servirá para el siguiente día marcar en la madera cada una de las piezas del nido.
Por último fuimos al huerto y trasplantamos alcornoques, que se habían sembrado en maceta este mismo año.
Transportando las plantas de alcornoque para trasplantarlas
Algunos de los alumnos se quedaron más tiempo comiendo unas almendras y avellanas.


José Manuel

martes, 3 de julio de 2012

SEGUNDO DÍA DEL CURSO-TALLER

Lo primero que hoy hicimos fue llevar los restos orgánicos que los niños habían traído de casa al compost. En el montón de compost estuvimos viendo como había unos gusanos que transformaban los restos en un buen abono. Una cosa que llamó la atención a todos fue el fuerte olor. Este olor se irá apagando a medida que se vaya convirtiendo en el abono que buscamos para alimentar nuestras plantas.
A continuación identificamos semillas. Sacamos las semillas que cada uno había traído de casa y repartimos en cuatro botes de yogur para cada uno, cuatro diferentes semillas. Apuntamos sus nombres y las dibujamos. Después sembramos las semillas en los botes, haciéndolo con más cuidado que ayer e indicando paso a paso como sembrarlas. Las regamos junto con las lechugas que sembramos ayer y las llevamos a un sitio fresco y sombreado del huerto a la espera de que nazcan.


Vamos a recolectar las partes de plantas para el herbario

Esto nos ocupó un gran tiempo. Lo siguiente fue recolectar partes de plantas del huerto para hacer un herbario. Recogimos hojas de calabacín, de pepino, de sandía, de zanahoria, de orégano y también de malas hierbas. Esto nos sirvió para identificar diferentes plantas: cultivos, aromáticas y malas hierbas. Entre periódicos pusimos las plantas y a continuación las metimos en la prensa para que se vayan secando.

  

Con las plantas recolectadas, apuntamos sus nombres y las metemos en periódicos para secarlas en la prensa
Por último alguno de nosotros pudimos disfrutar de unas almendras que uno de los alumnos trajo, buenísimas.









José Manuel

lunes, 2 de julio de 2012

PRIMER DÍA DEL CURSO-TALLER

Hoy ha sido el primer día de nuestro curso-taller de huerto ecológico. Hemos sido ocho. Creo que nos hemos divertido y aprendido, todos de cada uno.
En primer lugar estuvimos viendo un vídeo muy ilustrativo sobre tomates transgénicos y tomates ecológicos (http://www.youtube.com/watch?v=JWwkiaY1yVg) que nos sirvió de punto de inicio para comprender que en el huerto ecológico se enriquece la tierra con estiércol y con agua. Nos reímos con el vídeo.
A continuación aprendimos por qué las plantas tienen dos nombres, uno común y otro científico, y pusimos como ejemplo la lechuga, de la que más tarde recogeríamos sus semillas y las sembraríamos en botes de yogur. Observamos que las semillas de las lechugas eran, como decía uno de los niños, como “pipas muy chicas”.
Por fin salimos al huerto, y estuvimos haciendo una primera identificación de los cultivos, tocando sus hojas, y oliendo sus aromas. Vimos como las patatas bajo la tierra tenían sus tubérculos. Nos sorprendió el olor fuerte del tomate y la áspera hoja del pepino. Si algo nos gustó fueron los calabacines, con sus grandes frutos que pudimos cosechar al final de la clase.
También probamos las fresas, que aunque pequeñitas estaban muy sabrosas. Nos acercamos al montón de compost, comprobamos que había bichitos comiendo y transformando los restos orgánicos.  Tocamos el compost y notamos que estaba caliente, pues así es como se hace todo estiércol, con temperatura, agua y fermentando.
Dibujamos un plano del huerto en las libretas numerando las parcelas y apuntando sobre el terreno que cultivo había en cada cachito de huerto.


Al final de la clase repartimos los calabacines y recordamos lo que necesitaríamos para el día siguiente.


José Manuel